En la actualidad, el Samsung Hwaseong Campus, que alberga las instalaciones de I + D y fabricación de última generación de la compañía para soluciones de memoria y lógica, se convirtió en el primer sitio de semiconductores en lograr el Estándar Carbon Trust para Agua. Esta codiciada certificación, que reconoce a las organizaciones que han adoptado un enfoque de mejores prácticas para medir y administrar su uso del agua, refleja el compromiso continuo y extenso de Samsung para defender la sostenibilidad.
La gestión sostenible del agua ha estado en el centro de los esfuerzos medioambientales de Samsung durante más de una década. Las extensas prácticas de gestión del agua de la empresa se centran principalmente en las 3R: reducir, reutilizar y reciclar. Para minimizar su huella hídrica, Samsung optimiza constantemente sus procesos y equipos de fabricación. La compañía también está utilizando tecnología de filtración de agua, conocida como "proceso de membrana", para aumentar su tasa de reciclaje de agua al tratar las aguas residuales y reutilizarlas en instalaciones de servicios públicos.
El año pasado, esos esfuerzos ayudaron a Samsung a conservar varios cientos de millones de galones de agua solo en el campus de Hwaseong. Mientras que entre 2017 y 2018 el sitio consumió un promedio de 13,24 mil millones de galones de agua por año, en 2019 los niveles de consumo cayeron a 12,97 mil millones de galones. Esto se traduce en alrededor de 274,7 millones de galones de ahorro de agua por año, lo que es suficiente para albergar a unas 200.000 personas en Corea durante un mes entero.
Samsung también emplea un equipo de expertos en agua dedicados que se aseguran de que sus tecnologías de tratamiento de agua se mantengan ecológicas. Como resultado, en lugar de opciones de procesamiento químico, la empresa utiliza procesos respetuosos con el medio ambiente, como la electrodesionización, y equipos de bajo consumo energético para producir el producto. Agua ultrapura necesaria para la fabricación de semiconductores a nanoescala.
Nunca se contenta con dormirse en los laureles, Samsung se compromete a seguir luchando por la sostenibilidad en sus sitios de semiconductores y buscará minimizar su huella ambiental en cada oportunidad.